En el Restaurante Círculo Mercantil, del Casino Gran Vía, se celegró la cena de gala de la II Cumbre Iberoamericana del Juego
En el Restaurante Círculo Mercantil, del Casino Gran Vía, se celegró la cena de gala de la II Cumbre Iberoamericana del Juego

El número 24 de la Gran Vía madrileña alberga suculentas sorpresas. Sede en otro tiempo del selecto Círculo de la Unión Mercantil e Industrial de Madrid, este palacete acoge hoy el casino Gran Vía. Además de un espacio dedicado al juego, no sólo destaca por sus mesas de black jack, sino también por las de mantel y cubiertos, y por su propuesta de ocio.

El profano puede sentirse intimidado por la aureola que acompaña a los casinos: bulliciosas criptas de juego, cónclaves de póker, salas atestadas de tragaperras y sombrías mesas de tahúres. Puede pensarse también que la oferta gastronómica se ciñe a meros tentempiés o desalmados ambigús sin gracia, para reponer fuerzas aprisa antes de volver a entregarse al absorbente juego. Casino Gran Vía parece querer empeñarse en desmentir esta imagen gracias a sus pistas gastronómicas y de ocio.

El Restaurante Círculo Mercantil, dentro del propio casino, es el espacio donde el chef Iván Sánchez –cuya trayectoria se ha consolidado junto a nombres reputadísimos como los de Arzak, Aduriz y Berasategui–,apuesta por la cocina mediterránea con productos de temporada, con hechuras clásicas y prestando especial atención a carnes (presa ibérica asada, espárragos trigueros y puré de boniato) y pescados (ventresca de bonito con piparra y sofrito acidulado de tomate). Así como los arroces, con los que Iván muestra su destreza, con especialidades como el arroz meloso de jarrete de ternera blanca con alcachofas. Una buena manera de aproximarse a su cocina son sus interesantes menús de degustación, en versiones corta y larga. El primero de ellos ofrece cuatro platos por 38 euros, mientras que por 54 euros podemos disfrutar de su versión larga con seis platos. Los blancos, negros y dorados del restaurante son un lujoso acicate de la experiencia culinaria.

Junto a los placeres de la mesa, cabe también recrearse con la visita al impresionante edificio que alberga el casino. La visita al mismo ofrece la posibilidad de adentrarse en uno de los edificios más emblemáticos pero desconocidos de Madrid, con sus señoriales escaleras de mármol, la imponente vidriera de la casa francesa Maumejean y las diferentes salas, cada una con su elegante y peculiar atmósfera. La oferta gastronómica se completa con el coqueto Bulle Champagne Bar –con una suntuosa variedad de champagnes–, y The GV Corner, un opulento espacio dedicado a la coctelería bajo la cúpula de la primera planta, donde disfrutar de cócteles a muy buenos precios y una variedad de bocados que cuenta además con un escenario de música en vivo a diario. A pie de calle, su GV24 Artist´s Bar es una cafetería que ofrece soluciones para cada momento del día, desde el desayuno hasta la cena, el afterwork o la copa tardía.

Decididamente, Madrid y la Gran Vía están de enhorabuena con Casino Gran Vía, que ha recuperado para el público un edificio icónico donde ampliar las posibilidades de ocio durante casi todo el día, en un marco distinguido. Porque la fortuna y el apetito no entienden de horarios.

Restaurante Círculo Mercantil
Gran Vía, 24
Reservas: 91 171 13 49