Las críticas por fomentar la ludopatía cercan a un sector muy tecnológico que vive dos crisis: la reputacional y la de un mercado saturado.
«Es muy fácil atacarnos y muy difícil salir en nuestra defensa». Así resumo Xabier Rodríguez-Maribona, director general de RETAbet, la complicada situación en la que se encuentran las casas de apuestas deportivas ‘online’ un sector que agrupa a más
de 40 empresas reguladas en España y cuya imagen social se erosionada por su contribución al problema de la ludopatía.
«Los estudios de la Universidad Carlos III han demostrado que es una adicción que afecta solo al 0,3% de la población de -entre 18 y 75años-. Quien la sufre, va a acabar apostando en timbas, en el casino, o haciendo la Quiniela», se defiende el directivo de la empresa vasca, que rehusa compararse con el tabaco o el alcohol por considerados mucho más dañinos para la sociedad.
Esa percepción negativa de la actividad se ha traducido en la ley que restringe el patrocinio de casas de apuestas al deporte, que obliga a finalizar el contrato que RETAbet tenía con el Bilbao Basket, a pesar de que le quedaban aún 7 años de vigencia. «Notros seguiríamos encantados con el patrocinio. De hecho, firmamos por 10 años cuando bajaron a liga LEB para demostrar muestro compromiso alargo plazo pese al descenso de categoría», explica Rodríguez-Maribona.
En cualquier caso, el negocio continúa creciendo. RETAbet es rentable, ingresa en sus cuentas el 13% del volumen de las apuestas que so hacen en su plataforma -440 millones de euros en 2019-. y convierte entre el 0,7% y el 1% en beneficio neto. Así, ha incrementado su plantilla hasta el medio millar de personas -90 con perfiles tecnológicos y sueldos elevados-, desarrolla tecnología propia que vende a empresas de otros países, y ha accedido al «top 50» de las empresas vascas.
Suena extraño que se reivindique como una empresa tecnológica.
Mire, de tres Ingenieros que lo teníamos en el departamento tecnológico en 2010 hemos pasado a 70. La mayoría son jóvenes, y seguimos contratando a personal muy cualificado al que ofrecemos empleo de calidad. Entre Kirolbet y nosotros hemos creado 800 puestos de trabajo directos en el País Vasco. Desarrollamos ‘software’ sistemas de inteligencia artificial, y nuestras máquinas autoservicio, que se fabrican por miles en muestro entorno y que vendemos a gigantes
internacionales. Y ahora hemos creado Four9s dentro de la iniciativa Biscay Start up Bay, de la Diputación de Bizkaia, para ofrecer sistemas que optimizan el rendimiento de bases de datos de cualquier Industria. No muchas tecnológicas en Euskadi pueden decir lo mismo.
Tienen ya más del 50% de cuota de mercado en Euskadi, Navarra y la Rioja, y presencia en toda España. ¿Por qué se expanden países como Perú?
En mercados maduros como el de Euskadi ya apenas hay posibilidad de crecimiento, así que, como hacen muchas otras empresas, nos internacionalizamos Estados Unidos va a ser el nuevo gigante del sector, pero vemos mercados emergentes interesantes también en Latinoamérica y África, aunque hay que sabor adaptarse a sus gustos. Lo que tenemos claro es que abriremos nuevos mercados con calma, de forma conservadora. Nuestro objetivo no es engordar el Ebitda (resultado bruto de explotación) sino sobrevivir.
Suena un poco dramático.
Es evidente que so está produciendo un proceso de consolidación en el sector Y es lógico, porque ha habido un «boom» en las casas de apuestas «online» y el
mercado se ha saturado. Hay unas 160 empresas, y solo una decena tenemos beneficios. Codere y Cirsa, por poner dos ejemplos, es tuvieron en pérdidas el año pasado. Creo que, al final, quedarán 5 o 6. Y si continúan poniéndonos palos en las ruedas, acabaremos por desaparecer todos.
Critica la hipocresía de que no se denuncien las apuestas que controla el Estado.
Existe una clara discriminación entre lo público y lo privado. Loterías y Apuestas del Estado es la mayor empresa pública con diferencia. Y en el ámbito presencial, la ludopatía se refleja más en la lotería o la quiniela, donde nadie levanta actas o impone sanciones. Lo mismo sucede con la ley dela publicidad, que nos limita a nosotros pero no a la ONCE, por ejemplo. Sin embargo, las casas de apuestas somos más transparentes: repartimos un mayor porcentaje en premios, permitimos que la gente apueste a lo que conoce bien, y el jugador sabe exactamente cuánto ganará sí acierta. Nuestros productos han dejado obsoletos a los del Estado. Y aquí siempre se juega contra la casa, no se hacen apuestas cruzadas como en pelota, otro de los ámbitos en los que la gento ha apostado tradicionalmente.
Se crítica que fomentan la ludopatía permitiendo apostar a deportes minoritarios en países exóticos.
La gente busca variedad de apuestas y la competencia ofrece muchas más opciones. Lógicamente, cuanto mayor volumen alcanzamos, más mitigamos nuestro riesgo, Pero lo cierto es que existe una ludopatía estructural en la sociedad que existirá con o sin nosotros y que está íntimamente relacionada con trastornos como el estrés o la depresión. Curiosamente, con todos los millones que pagamos en impuestos, aún no hay programas oficiales en la sanidad pública para combatir la ludopatía, Faltan programas de formación dirigidos a los jóvenes, para que se entienda el Juego como algo meramente lúdico. A mí no me interesa que haya menores en nuestras tiendas, y la empresa no basa su modelo de negocio en los ludópatas. Creo qué los datos objetivos no avalan las feroces críticas que recibimos.
Fuente: elcorreo.com