El autor Rafael Andrés realiza un análisis del Anteproyecto de Ley Orgánica para la protección de las personas menores de edad en los entornos digitales
Con dicho anteproyecto se pretenden tomar importantes medidas como, entre otras, la obligación para los fabricantes de dispositivos digitales con conexión a internet de implementar sistemas de control parental que se activen automáticamente al configurar los dispositivos; la elevación de la edad mínima para que los menores puedan prestar su consentimiento al tratamiento de datos personales, pasando de los 14 a los 16 años y la prohibición de acceso a las lootboxes o cajas botín de videojuegos para menores de edad.
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Este artículo se puede encontrar en Revista Aranzadi de Derecho de Deporte y Entretenimiento