Los trabajadores de los bingos porteños se declararon hoy en estado de alerta y movilización ante el eventual cierre de cinco salas, lo que ocasionaría unos 400 despidos.
El Sindicato de Trabajadores de Juegos de Azar (Aleara) confirmó la medida ante la ratificación de Lotería Nacional del cierre inminente de los 5 bingos que funcionan en la Ciudad de Buenos Aires.
Ariel Fassione, secretario gremial de Aleara, explicó que Lotería le informó a una de las empresas concesionarias que definitivamente no hay posibilidad de una nueva prórroga o un eventual llamado a licitación.
Por ello, indicó Fassione, las salas cerrarán sus puertas en cuanto se resuelva la medida cautelar judicial que las mantiene en funcionamiento, lo que provocará que unos 400 trabajadores pierdan sus puestos de empleo.
La jueza Stella Maris Vulcano, a cargo del juzgado laboral número 40, había hecho lugar en 2015 a una presentación de Aleara para mantener en actividad los bingos ubicados en Congreso, Caballito, Flores, Belgrano y peatonal Lavalle.
Esa presentación fue realizada ante la falta de acuerdo entre el Instituto de Juegos de la Ciudad de Buenos Aires y Lotería Nacional.
«Ahora, tras el cambio de gobierno, los dos organismos oficiales tienen la misma decisión de cerrar las salas, pero también es cierto que no se cumplieron ningunas de las medidas requeridas por la jueza en cuanto a resolver la situación laboral de los trabajadores», explicó Fassione.
La jueza citó para una nueva audiencia el próximo 29 de abril.
El dirigente sindical ratificó que el gremio aún aguarda el llamado de Lotería para hablar de «continuidad laboral y estabilidad de empleos» pero reconoció que si la decisión política está tomada, entonces hay que hablar de la «reubicación de los trabajadores».
Fassione puntualizó que Aleara presentó una nota ante el Ministerio de Trabajo que conduce Jorge Triaca para que la situación pueda enmarcarse en el programa de Restructuración Productiva, contemplado en la Ley de Contrato de Trabajo, pero no hubo respuesta.
«Es reconocido por todos, y principalmente por el propio gobierno nacional, que el país vive una situación económica y social complicada y por eso pedimos que las autoridades actúen con prudencia y responsabilidad a la hora de resolver el futuro de 400 familias», dijo el dirigente.