Edu Oriol, exjugador del Real Zaragoza

La mayoría de los implicados son naturales de Sanlúcar de Barrameda y contactaron con antiguos compañeros de diferentes clubes para adulterar el resultado de partidos, entre ellos, un Gerena-Conil disputado hace dos meses

La Policía Nacional trasladó este martes a la Comisaría de Sanlúcar de Barrameda a la mayoría de los detenidos en la operación Conífera, una investigación que ha permitido desarticular una trama que amañó el resultado de partidos del fútbol modesto para embolsarse grandes sumas de dinero con apuestas deportivas. Uno de los encuentros que están bajo sospecha es un Gerena-Conil de la Tercera División RFEF, que se disputó el pasado abril y acabó con un marcador de 6-0, según han confirmado a El Confidencial fuentes próximas al caso.

Entre los detenidos se encuentra Gonzalo Poley, un mediocentro que militó esta temporada en el Xerez Deportivo de Primera RFEF; Guille Campo, defensa del CD Rota de la Tercera RFEF; Adrián Romero, interior izquierdo también del CD Rota; José Romero, que jugó en el Atlético Sanluqueño hasta el pasado 1 de junio y ocupaba la demarcación de central, y otro defensa del equipo gaditano, el lateral derecho Edu Oriol, que llegó a jugar dos temporadas en Primera División con el Real Zaragoza.

Todos ellos, salvo Oriol, son naturales de Sanlúcar de Barrameda y se conocían desde hace años. La operación policial se concentró en este municipio por ese motivo, aunque también hubo arrestos en las provincias de Sevilla, Badajoz y Almería. No hay ningún indicio contra el Atlético Sanluqueño, pese a la concentración de detenidos en el municipio gaditano. De hecho, el club había anunciado su intención de contar la próxima temporada con Poley y Campo para continuar con su política de incorporar a jugadores locales, pero ha decidido romper cualquier tipo de acuerdo con ellos.

En Badajoz fueron detenidos otros tres implicados. Como adelantó El Periódico de Extremadura, se trata de jugadores del UD Montijo, que ha militado esta temporada en el Grupo IV de la Segunda RFEF. Uno de ellos es el defensa central Javi Chino. El UD Montijo perdió su último partido de liga contra el último clasificado por un asombroso 1-7. La actitud de los defensas del conjunto local provocó las protestas del público.

Uno de los partidos que está en el foco de las diligencias es un Gerena-Conil disputado el pasado 17 de abril, perteneciente a la penúltima jornada del Grupo 10 de la Tercera RFEF. El equipo local necesitaba ganar para entrar en los puestos del playoff de ascenso y el Conil ya no se jugaba nada, pero el resultado final fue más abultado de lo que dictaba la lógica. El Gerena llegó al descanso ganando 3-0 y metió otros tres goles en la segunda parte. También se están analizando encuentros del CD Rota, que está incluido en el mismo grupo de la Tercera RFEF.

Uno de los partidos que está en el foco de las diligencias es un Gerena-Conil disputado el pasado 17 de abril, perteneciente a la penúltima jornada del Grupo 10 de la Tercera RFEF. El equipo local necesitaba ganar para entrar en los puestos del playoff de ascenso y el Conil ya no se jugaba nada, pero el resultado final fue más abultado de lo que dictaba la lógica. El Gerena llegó al descanso ganando 3-0 y metió otros tres goles en la segunda parte. También se están analizando encuentros del CD Rota, que está incluido en el mismo grupo de la Tercera RFEF.

Con los marcadores ya prefijados, los cabecillas de la organización realizaban apuestas en casas nacionales, señalan las fuentes consultadas. La red combinaba los encuentros que previamente había adulterado con pronósticos de Primera División de escaso riesgo para elevar de ese modo las cuotas que ingresaba y tratar de camuflar el engaño.

La Dirección General de Ordenación del Juego, del Ministerio de Hacienda, detectó en mayo de 2021 un volumen de apuestas inusual para un duelo de Tercera División y dio la voz de alarma.

A partir de ese momento, se hizo cargo del caso el Centro Nacional Policial por la Integridad en las Apuestas y el Deporte (Cenpida), de la Policía Nacional, con sede en Madrid. Se trata de la misma unidad que lideró la operación Oikos, en mayo de 2019, contra la trama liderada por los exjugadores Raúl Bravo y Carlos Aranda que presuntamente adulteró partidos de Primera, Segunda y Tercera División.

La operación Conífera de este martes es fruto de más de un año de averiguaciones y puede saldarse con la detención de más de una veintena de personas.

Fuente: elconfidencial.com