La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal dedicada al fraude con tarjetas de crédito a través de internet, en concreto en páginas de apuestas on-line, que estafó a vecinos de Ampuero, en Cantabria; Albacete, Granada, Málaga y Madrid. En la operación se ha detenido a cuatro personas e imputado a otras siete por la comisión de estafas en la red por valor de 9.362 euros.
Los cuatro detenidos, todos ellos de nacionalidad rumana y afincados en varias localidades valencianas, tienen entre 21 y 39 años, y responden a las iniciales L.E.M., O.G.L., A.C., e I.V.. Por su parte los imputados, de entre 23 y 56 años, son: A.M.T., S.N., M.L.F.C., E.G.B., S.G., Y.J. y J.V.M.. Algunas de estas personas tenían antecedentes por hechos delictivos similares en otros puntos del territorio nacional.
Los acusados obtenían de forma fraudulenta datos personales de titulares de tarjetas de crédito, sus numeraciones y el código de seguridad CCV de las mismas. También crearon 15 cuentas de correo electrónico, conectadas desde 30 IPs diferentes y utilizado 55 tarjetas de crédito distintas, registrándose 139 operaciones en páginas web de casas de apuestas, casinos online y operadoras de telefonía móvil.
La actuación ha sido llevada a cabo por efectivos de los equipos territoriales de Policía Judicial de Almansa (Albacete) y de Veléz-Malága (Málaga), en el marco de las operaciones denominadas ‘GAMING’ y ‘PASS1’, ha informado este martes la Guardia Civil
La organización, que conformaban tanto detenidos como imputados, cometió hasta cuatro estafas a través de Internet mediante el uso fraudulento de tarjetas de crédito en páginas de apuestas on-line.
La mayoría de los miembros del grupo se encontraban asentados en la localidad valenciana de Gandía, aunque algunos de ellos cambiaban constantemente de residencia, utilizando viviendas de alquiler de localidades limítrofes del sureste valenciano para obstaculizar cualquier tipo de investigación de la que pudieran ser objeto.
INVESTIGACIONES
Las investigaciones se iniciaron a mediados del año 2013, a raíz de dos denuncias formuladas ante la Guardia Civil de Almansa y Caudete, donde vecinos de ambas localidades manifestaron haber sido víctimas de unas estafas a través de internet mediante 41 cargos fraudulentos a sus tarjetas de crédito por valor de 2.210 y 1.802 euros, respectivamente.
Igualmente se constató la existencia de una tercera estafa en la localidad malagueña del Rincón de la Victoria, cometida en los mismos términos y por las mismas personas, aunque esta vez se habían realizado 50 cargos fraudulentos a una tarjeta por importe de 3.800 euros.
Las denuncias presentaban como nexo común que todas las tarjetas habían sido utilizadas en conocidos comercios on-line, principalmente casas de apuestas y casinos y que los autores habían logrado validar cargos de cantidades similares, las cuales oscilaban entre los 10 y 200 euros, para posteriormente desviar el dinero y las ganancias a cuentas bancarias abiertas por el grupo para después retirarlo en efectivo.
A medida que avanzaban las investigaciones se puso de manifiesto que se trataba de un grupo perfectamente organizado, con asignación de cometidos específicos a cada uno de sus miembros, así como la existencia de otras estafas cometidas por la organización en las localidades de Maracena (Granada), Ampuero (Cantabria) y Torrelodones (Madrid).
Finalmente las investigaciones llevaron a los agentes hasta las localidades valencianas de Gandía y Oliva, lugares desde donde se realizaban las operaciones fraudulentas, practicándose entonces las primeras detenciones de algunos integrantes de la organización. Entre los detenidos figuraba el subjefe del grupo, encargado, entre otros cometidos, de alquilar por periodos muy breves de tiempo las viviendas utilizadas por otros integrantes del grupo para su actividad.
Las actuaciones llevadas a cabo en varias localidades valencianas se saldaron con la detención después de dos de las integrantes femeninas más activas del grupo.
MODUS OPERANDI
La organización obtenía el nombre de los titulares de las tarjetas y su numeración mediante el clonado o hackeado de las mismas para posteriormente acceder a través de la banca electrónica a las cuentas bancarias y realizar cargos no autorizados, que generalmente se hacían en casas de apuestas y casinos online.
Bajo apariencia de que se trataba de operaciones ordenadas por el titular, el dinero y las ganancias de las apuestas y juegos de azar eran más tarde desviados hacia otras cuentas creadas por la organización y finalmente lo retiraban.
Para tal fin abrían cuentas bancarias que en poco tiempo resultaban bloqueadas por sospecha de fraude y contrataban conexiones a Internet desde domicilios que abandonaban en pocos meses, o bien se conectaban desde terminales móviles que daban de baja de igual forma.
Acto seguido desaparecían rápidamente cambiando de domicilios, y ello, unido a que normalmente las entidades bancarias asumían con celeridad las cantidades defraudadas, eran muchos los estafados que no llegan a formular denuncia, circunstancia que dificultó en gran medida la labor policial.
Los Equipos de Policía Judicial de Almansa y de Vélez-Málaga, instruyeron las correspondientes diligencias que, junto con los detenidos, fueron entregadas en los Juzgados de Instrucción número Uno de Almansa y número Uno de Málaga.
Fuente: Europapress.es