La Plataforma para el Juego Sostenible y el Gobierno de Canarias impulsan la prevención de adicciones en el ámbito familiar a través del Proyecto FES, que defiende la formación, la educación y la sensibilización como ejes clave para conseguirlo.

Pedro García Aguado, embajador del Proyecto FES, ha sido el encargado de realizar una primera sesión con los alumnos del CIFP Felo Monzón Grau Bassas en Las Palmas de Gran Canaria.

La Plataforma para el Juego Sostenible y el Gobierno de Canarias han puesto en marcha este jueves el Proyecto FES, una campaña de prevención de adicciones comportamentales en adolescentes. El acto de presentación ha contado con la participación del consejero de Educación, FP, Actividad Física y Deportes, Poli Suárez; la consejera de Presidencia, Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad, Nieves Lady Barreto, y el viceconsejero de Administraciones y Transparencia, Antonio Llorens.

“La libertad es el centro de lo que estamos haciendo hoy aquí. Dar herramientas para que cuando tengáis un móvil en las manos, podáis decidir libremente y que nada tóxico os invada. El proyecto FES ayuda a no perder esta libertad, aprovechadlo”, ha asegurado Nieves Lady Barreto.

Por su parte, Poli Suárez ha recordado que a lo largo del curso pasado ya se tomaron medidas para limitar el uso de los teléfonos móviles en los centros educativos. “La jornada de hoy y el Proyecto FES servirán para comprender algunas de las medidas que se toman desde las administraciones. Para que los jóvenes no se sientan prisioneros del teléfono y para evitar y poder detectar a tiempo problemas de salud mental. Es una herramienta importante para los alumnos, para las familias y para el personal docente y socioeducativo”, ha afirmado.

Pedro García Aguado, embajador del Proyecto FES, ha realizado a lo largo de la mañana una charla para jóvenes de entre 13 y 14 años en el teatro del CIFP Felo Monzón Grau Bassas de Las Palmas de Gran Canaria. El medallista olímpico en waterpolo ha puesto en valor la importancia de mantener unos hábitos de vida saludables y la realidad del mundo digital, con la existencia de posibles contenidos perjudiciales y riesgos potenciales (videojuegos, e-sports, juegos de azar, redes sociales, móvil…).

“El Proyecto FES llegará a los más de 500 centros públicos, privados y concertados que hay en todo el territorio canario. Hoy hemos arrancado, pero todos los contenidos del proyecto quedan a disposición de las AMPASy de los colegios para que puedan seguir profundizando y trabajando con ellos”, afirma Cristina García, portavoz y coordinadora de la Plataforma para el Juego Sostenible.

Con el objetivo de aumentar el nivel de difusión y conocimiento de la campaña, el Gobierno de Canarias organizará como mínimo una sesión con jóvenes en cada una de las Islas Canarias de la mano de Pedro García Aguado.

Proyecto FES: formación, educación y sensibilización

Las adicciones comportamentales en menores es una cuestión que preocupa a la comunidad educativa, a las familias y a la sociedad. Con el avance de las nuevas tecnologías, las adicciones están tomando dimensiones preocupantes y que necesitan de una respuesta coordinada y eficaz que facilite su prevención.

El Proyecto FES, impulsado por las asociaciones canarias AJAC, APEBI, APEMARTE y ASPROMARE, colaboradoras con la Plataforma para el Juego Sostenible, es una campaña de prevención de adicciones comportamentales en adolescentes que pretende formar, educar y sensibilizar a adolescentes, a sus familias, y a la comunidad educativa, en la importancia de la intervención primaria a través de la prevención, de tal manera que gracias a ella se intente evitar el desarrollo de adicciones comportamentales por parte de los jóvenes, al tiempo que se fomentan hábitos de vida saludables.

Para ello, el Proyecto FES cuenta con herramientas diseñadas por profesionales dedicados a la atención clínica de las adicciones comportamentales, que hacen de la prevención primaria (o intervención antes de que el problema aparezca) su principal objetivo. Con FES se pretende informar y educar desde evidencias científicas y no moralistas, con la puesta en marcha de charlas y talleres en los que se demuestre que la vía de la prevención y la educación es la única realmente eficaz para evitar conductas adictivas por parte de los adolescentes.