Primero fue la Corte de Apelaciones la que rechazó el recurso presentado por Boldt Peralada, que buscaba invalidar el proceso de licitación del casino de Chillán, donde el Gobierno Regional del Biobío (Gore) le dio 0 puntos a su oferta y 300 a su competidor Marina del Sol. Luego, la Corte Suprema lo ratificó, y en paralelo la Contraloría decidió abstenerse ante un reclamo que había presentado el consorcio argentino-español.
Al respecto, Ricardo Abdala, abogado de la firma extranjera, anticipó a «El Mercurio» que en estos días presentarán distintas acciones legales, y también ante instituciones administrativas pertinentes en esta licitación.
«En breve vamos a hacer nuevas presentaciones judiciales y administrativas, porque hasta ahora nadie ha zanjado los temas de fondo», aseguró.
Si bien no especificó el tipo de medida, éstas podrían recaer en tribunales y a instancias como la Contraloría nuevamente.
El abogado destacó que han existido tres irregularidades: se les entregó menor puntaje en su proyecto; Marina del Sol tendría sus garantías bancarias vencidas, y además no cuenta con el capital pagado para postular a dicho concurso.
«En nuestra opinión han querido beneficiar directamente a un competidor local, que es de la Región del Biobío y que conocen. Nos parece que se acomodaron los elementos para beneficiar a Marina del Sol», acusó Abdala, haciendo referencia al peso que tiene la familia Imschenetzky en dicha región.
En las votaciones del Gore se advirtió que la propuesta de Boldt Peralada generaría ludopatía, puesto que está próxima a una universidad. Al respecto, el abogado resaltó que el proyecto de su competidor tendría un problema similar. «No parece curioso el argumento de ludopatía, puesto que nuestro proyecto está en la misma área de influencia que el de Marina del Sol. Además, ellos en Talcahuano -es decir, en la misma región- tienen un casino que convive con cuatro establecimientos educacionales», dijo.
Fuente: economiaynegocios.cl