Un hostelero de Oviedo ha sido condenado por el Juzgado de lo penal número 3 de la capital asturiana, acusado de haber robado hasta en dos ocasiones las recaudaciones de la máquina tragaperras de su propio establecimiento. El sujeto se hizo con un botín de 10.000 euros, tal y como indica LA NUEVA ESPAÑA.
El comienzo de esta rocambolesca historia se remonta al verano del año 2020, en concreto a los días 18 de julio y 22 de septiembre. Entonces, el ahora condenado habría utilizado la llave de su local para acceder a la recaudación de la máquina tragaperras que poseía en su interior.
Una vez dentro, el hostelero forzó la máquina para hacerse con un total, entre los dos días que atracó, de 10.000 euros. Además, en su intento por abrir la tragaperras, provocó unos desperfectos de cerca de 4.000 euros.
Su defensa
Por su parte, el acusado y su defensa se escudan en que había otras tres personas que poseían llaves del local, y que cualquiera de ellos podría ser también el autor del robo. Además, él dice no ser el culpable, alegando no tener ningún tipo de problema, ni de necesidad económica que le hubieran llevado a cometer el atraco.
Sin embargo, la magistrada entiende que él es el culpable, no solo por tener acceso fácil al local, sino por tratarse de un robo «selectivo», en el que no causó ningún otro daño en el establecimiento, algo que, las autoridades entienden, si hubiera hecho un atracador ajeno al local, habría sucedido como en la mayoría de estas ocasiones. Además, se ha considerado «notablemente imprecisa» la declaración del hostelero.
En consecuencia, el acusado ha sido declarado culpable y deberá pagar a la empresa de recreativos, dueña de la máquina tragaperras, 5.400 euros. Cabe destacar que la Fiscalía retiró los cargos por este atraco, debido a tratarse de una denuncia falsa, que el propio hostelero realizó personándose en comisaría.
Fuente: theobjective.com