Hace un par de años podíamos encontrarnos en casi cualquier lado a algún famoso o influencer promocionando un proyecto de tokens no fungibles (NFT). Sin embargo, el tiempo ha pasado bastante rápido, y actualmente, incluso las webs que se dedican a las apuestas con criptomonedas advierten deliberadamente a sus usuarios de no invertir en NFT.

Si no tienes mucha idea del tema o te has olvidado de su existencia, los NFT son entradas a una blockchain, normalmente a la cadena de bloques de Ethereum, la cual representa la propiedad de activos, y por lo general, estos eran objetos de juego o un archivo de imagen, aunque algunos NFT también podían estar vinculados a objetos físicos.

No existe ninguna duda que el apogeo de estos tokens estuvo entre los años 2021 y 2022, donde los coleccionistas no dudaban en pagar cientos de miles de dólares por NFT o hasta millones . Pero en solo poco más de un año el mercado de estos activos ha sufrido un apocalipsis, de acuerdo con un informe realizado por la plataforma DappFambl.

Los resultados del documento han sido simplemente impactantes. De 73.257 colecciones de NFT, el 69,795 tiene una capitalización de mercado de “0” en Ether (ETH), esta cifra representa el 95% de los “activos”. Visto desde otra forma, el informe indica que 23 millones de personas poseen alguna inversión que carece de total valor.

Una oferta abismal que se enfrenta a una demanda que se reduce constantemente

A pesar de que millones de personas han perdido su inversión al contar con NFT sin valor, todavía hay cientos de toneladas de NFT que no se han vendido, lo cual, si tenemos un mínimo conocimiento de economía, sabremos que representa un gran problema.

De acuerdo con el análisis de dappGambl, solo el 21% de las colecciones de NFT examinadas se han vendido en su totalidad. Esto quiere decir que cuatro de cada cinco NFT existentes, no se han vendido.

Este escenario donde reina el desequilibrio ha creado un mercado en el que los compradores de inversiones potenciales son altamente exigentes, por lo que evalúan detalladamente la singularidad, el estilo y el valor potencial de los NFT antes de siquiera considerarlos una compra potencial.

Esto último vuelve el camino de aquellos proyectos que no cuenta con casos de usos claros, narrativas sólidas o que carecen de valor artístico, bastante empinado cuando se trata de atraer atención y ventas, así lo señala dappGambl.

Y a pesar de que el espacio NFT ha sido introducido como un modelo revolucionario de propiedad y una forma diferente de monetizar activos digitales, no hay que olvidar que el mercado en el que se encuentran es altamente especulativo y volátil. Una dura realidad que ha marcado el fin de los días para los NFT.

Un valor difícil de establecer

El valor es otro de los problemas a los que se enfrenta este mercado, pues, el 18% de los principales coleccionistas de NFT tienen un precio mínimo de “0”, lo que indica que una gran parte de los coleccionistas está dando sus últimas patadas para mantenerse a flote en el mar de la demanda.

Por otro lado, el 41% de los NFT tiene un precio de entre 5 y 100 dólares, y menos del 1% tiene un valor por encima de los 6.000 dólares, por lo que establecer un valor genuino en este mercado, parece ser una tarea imposible.

Una fuente de contaminación increíble

Las criptomonedas y sus vecinos no tan amigables, los NFT, adyacentes a blockchain necesitan de ordenadores, los cuales, necesitan de energía. Debería valer la pena quemar esa energía en la creación de criptos y alimentar los blockchains, pero, según las cifras, esto está siendo un completo error.

Los NFT, debido a que se encuentran registradas en una cadena de bloques y no son acuñadas de forma matemática, como las divisas, no gastan energía de la misma manera, pero aun así siguen siendo responsables de una cantidad abismal de carbono a la atmósfera para acuñadas en las cadenas de bloques y alimentar su existencia.

El informe de dappGambl ha indicado que, además de las 73.000 colecciones que se han examinado, existen 195.699 más sin propiedad aparente ni cuotas en el mercado. La energía que se necesita para acuñar todos estos NFT equivale a 27.789.258 kWh de energía, o aproximadamente 16.243 toneladas métricas de CO₂.

Sería lo mismo que las emisiones anuales de energía de 2.048 hogares estadounidenses, 3.531 automóviles estadounidenses o 4.061 pasajeros volando de Londres (Reino Unido) a Wellington (Nueva Zelanda), todo ello quemado para crear colecciones de NFT que nadie compra.

La solución que propone la plataforma dappGambl es solo acuñar NFT que ofrezcan una utilidad real, como lo serían: activos del juego, accesos a eventos mediante este tipo de tokens o enlaces a productos físicos. Sin embargo, actualmente todo el mercado de los NFT ha sido una terrible idea; pero no nos crean a nosotros, sino a las cifras que demuestran el hundimiento del que hace unos años fue un mercado considerado como “prometedor”.

Fuente: mundodeportivo.com