a sociedad gestora del Palacio de la Ópera y el Concello han negociado el fin del contrato, que quiere dejar la empresa por pérdidas || El auditorio necesita dos millones de euros de arreglos

Palexco, el Palacio de la Ópera y el casino del hotel Atlántico. La primera en suelo portuario, las otras dos dependientes del Concello. Son las tres concesiones en la ciudad del grupo de empresas de José Collazo, todas en su particular encrucijada en la que tendrá que tomar parte y decisiones el nuevo Gobierno socialista de Inés Rey.

El Concello y la Sociedad para el Fomento y Desarrollo Turístico llevan casi tres años hablando del traspaso del Palacio de la Ópera, del que se quiere deshacer la empresa y cuya negociación tendrá que completar la nueva alcaldesa. En Palexco, el grupo Comar ha emprendido un cambio en el tipo de actividad, abriéndola a eventos, y prescindido de la dirección encargada de conseguir congresos para la ciudad, captación que tiene que asumir el Consorcio de Turismo. Por otro lado, el conglomerado sigue siendo concesionario de casino de los jardines, pero Marea aprobó la posibilidad de subirle el precio de la concesión.

La decisión más directa que tiene que tomar el Concello es sobre el Palacio de la Ópera, que gestionan a cambio de una asignación anual de 850.000 euros por los conciertos de la Sinfónica. Las conversaciones con la Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico comenzaron en 2016, debido a las pérdidas que ocasiona este recinto al grupo de Collazo Mato, que quiere abandonar una concesión que suma tres décadas. El Ejecutivo de Francisco Vázquez le otorgó la gestión por 50 años, incluido el parking. Hace unos meses, la empresa comenzó a despedir a personal (también en Palexco).

El principal problema es el estado del Palacio de la Ópera que, según un informe elaborado por el Ejecutivo anterior, necesitaría una inversión de dos millones de euros. Según el contrato y el Ejecutivo de Marea, los problemas del edificio son responsabilidad de la empresa concesionaria. El Gobierno predecesor se mostró dispuesto a que el Consorcio para la Promoción de la Música, de que depende la Sinfónica de Galicia, se hiciese con la gestión pero «no a cualquier precio», por lo que se dispusieron a negociar el coste de la recuperación de la concesión, la responsabilidad del arreglo de auditorio y también el futuro del parking. Su gestión sí es rentable para el grupo Collazo, sin embargo, la concesión del recinto va unida a la concesión de aparcamiento.

El declive del Palacio de la Ópera afecta especialmente a la Orquesta Sinfónica de Galicia una situación que incluso han denunciado sus músicos. Su director, Dima Slobodeniouk, explicó algunos de los problemas que sufre la OSG al trabajar en un recinto que se encuentra al borde del colapso por la falta de mantenimiento. En la lista de problemas que pone encima de la mesa sobresalen la mala acústica del recinto y la falta de seguridad, ya que la orquesta está sobre un foso muy fino, sujeto por varillas que define como muy peligroso además de molesto, ya que, cuando un solista está a su lado y se mueve, el suelo chirría. Por contrato, la concesionaria está obligada a devolver las instalaciones en un estado similar al que fueron entregadas.

La misma sociedad también gestiona Palexco. Los hoteleros han denunciado una caída en la previsión de congresos, que se trabajan a varios años vista y que son necesarios para paliar la caída de turistas en temporada baja. El plan de turismo elaborado en el mandato anterior por el Concello y el sector preveía la creación de un equipo en el Consorcio de Turismo para ello, que aún no se ha puesto en marcha. Al mismo tiempo, el grupo Collazo ha reorientado la gestión del espacio para intentar frenar las pérdidas, en una concesión que fue creada y otorgada precisamente para eso. La empresa ha decidido poner sus esfuerzos en atraer eventos y también espectáculos, lo que suma un auditorio artístico más a la ciudad.

Fuente: laopinioncoruna.es