El Gobierno decidió prorrogar la concesión actual para la explotación de juegos de azar en la Zona de Juego de Estoril, que incluye los casinos de Estoril y Lisboa, hasta que se inicie la nueva concesión en este espacio, debido a la licitación que aún está en curso.
La decisión fue aprobada este jueves en Consejo de Ministros y pretende evitar la interrupción de la actividad.
Se aprobó el decreto-ley que autoriza, excepcionalmente, en interés público, la prórroga de la actual concesión para el uso exclusivo de juegos de azar en Estoril hasta el inicio de la nueva concesión, resultante del procedimiento de licitación en curso, se lee en el Comunicado del Consejo de Ministros.
El Ministerio de Economía explica, en un comunicado, que el objetivo es evitar la interrupción de la actividad de la Zona de Juego de Estoril, interrupción que, debido a los plazos legales asociados a la conclusión de la licitación pública internacional para la concesión de exploración, sería inevitable y tendría un impacto económico relevante en los ingresos públicos, ya que dejarían de recaudarse cantidades significativas del impuesto especial del juego, siendo dichos fondos de crucial importancia para la financiación de las políticas públicas en el sector turístico.
“La alta complejidad que supuso el citado concurso público para la adjudicación de la operación en cuestión, a saber, la necesidad de solicitar un dictamen a una entidad externa, así como la necesidad de analizar las distintas manifestaciones que fueron presentadas por los competidores, determinaron que la la formalización del respectivo contrato de concesión sólo podrá tener lugar en enero de 2023”, agrega el Ministerio.
Las concesiones de las salas de juego de Estoril y Lisboa, así como la de Figueira da Foz, debían terminar a fines de 2020, pero debido al impacto de la pandemia terminaron prorrogando por dos años. En el caso del casino figueirense, la concesión debería permanecer en manos de Amorim Turismo por otros 15 años, como mínimo. El grupo del norte, que también posee el 32,7% de Estoril-Sol, fue el único que presentó una propuesta antes de la fecha límite, el 30 de septiembre.
En octubre, el jurado del concurso público internacional para la concesión de la Zona de Juego de Estoril decidió excluir la propuesta que había presentado Bidluck y entregar este negocio al grupo Estoril-Sol, controlado por los descendientes de Stanley Ho, que había ofrecido unos 20 millones de euros menos que el competidor.
Fuente: eco.sapo.pt
