local de juego en Elche

De un tiempo a esta parte cualquiera puede ver cuando sale a la calle la proliferación de negocios dedicados a los juegos y las apuestas. Así lo han constatado los vecinos de Elche, y el propio Ayuntamiento que en el último año ha tramitado una decena de licencias de apertura, que se suman a varias que gestionó en años anteriores, y a otras de negocios que han solicitado la ampliación, tanto en la ciudad como en las pedanías.

Así lo reconoce el concejal de Aperturas, Carlos Sánchez, que destaca el incremento de locales de este tipo en una ciudad como Elche, donde los expertos no lo consideran normal.

Este tipo de establecimientos se ubican por todas partes, y llama la atención municipal que en muchos casos se solicite licencias para grandes superficies, y que los locales ya existentes pidan permisos para ampliar sus instalaciones.

Además de los establecimientos dedicados en exclusiva a los juegos de azar y las apuestas deportivas, ha proliferado la instalación de máquinas específicas en negocios de hostelería. Un hecho que hace saltar las alarmas y las dudas de si se están tomando todas las medidas necesarias para evitar un uso indebido por parte de menores, ya que el acceso es muy fácil.

Lo que es una realidad, admiten tanto instituciones como colectivos y expertos que ayudan a personas con ludopatía, es que en la provincia de Alicante no existe un registro de negocios destinados a este fin, a los juegos de azar y las apuestas. Están porque se ven, pero ningún organismo, insisten las partes implicadas, se ha sentado a analizar su implantación.

Desde varios salones de juegos consultados por este diario insisten en que estos negocios cumplen con todos los requisitos que marca la legislación, y que se vela con cautela para que en ellos no hagan acto de presencia menores de 18 años. La legislación impide a los menores permanecer en este tipo de establecimientos. En este sentido, los negocios se enfrentan a cuantiosas multas si les pillan con menores jugando en el interior del local.

Otra cosa, advierten desde los propios establecimientos, es el control que se lleve a cabo en bares, cafeterías o pubs, en los que se instalan máquinas de apuestas deportivas y otro tipo de máquinas de juego, y que sí que están al alcance de los menores, ya que no tienen la entrada prohibida.

Desde la Asociación para la ayuda de afectados por la ludopatía, Vida Libre, de Alicante sostienen quela legislación actual es insuficiente para garantizar la identificación de las personas que acceden a este tipo de establecimientos. En este sentido, el presidente del colectivo, Antonio Castaño, advierte que los casinos y bingos cuentan con sistemas informáticos en el terminal de acceso, pero que estos sistemas no se exigen en los salones de juegos, para los que la normativa es menos estricta.

De ahí, apuntan desde Vida Libre, que sea más sencillo el acceso para personas que tienen problemas con el juego y para los menores de edad, que según los últimos estudios tienen cada vez más predilecciones por participar en este tipo de actividades de ocio y su riesgo de padecer ludopatía es mayor que en los adultos.

Alerta

De hecho, según los últimos estudios realizados por expertos el 1,2% de los jóvenes ya se consideran adictos al juego. Un porcentaje mayor que en la población adulta, donde el número de ludópatas es del 0,9%. Es por ello que los colectivos advierten que hay que prestar más atención a los menores.

El profesor de Psicología de la Universidad Miguel Hernández, Daniel Lloret, apunta que la accesibilidad a este tipo de locales como un factor que propicia que cualquiera pueda entrar en ellos. Además, los expertos insisten en la necesidad de regular las campañas publicitarias, ya que la cartelería también influye.

Medidas que los colectivos de afectados y los expertos consideran fundamentales para evitar que un simple juego de azar o apuestas acabe suponiendo un problema en el colectivo de adolescentes y en el de personas vulnerables a caer en la ludopatía.

Fuente: diarioinformacion.com