El creciente número de estados que han pasado a regular el negocio de las apuestas por internet ha provocado que lugares como Gibraltar o la Isla de Man, donde las empresas apenas pagan impuestos, pierdan atractivo como lugar donde establecer el domicilio fiscal. Así lo consideró ayer Sacha Michaud, presidente de la Asociación Española de Juego Online, en unas declaraciones que recoge el periódico El País.
«Cuentan menos. Son buenos lugares desde donde trabajar con mercados que todavía no están regulados, pero cada vez hay más países con regulación«, explica. En el análisis, el analista de Peel Hunt, Nicholas Bathram, cree que el menor ahorro en impuestos de Gibraltar se compensa con otros incentivos para las empresas: «Hay mucho talento en torno a la industria del juego y las empresas han invertido mucho dinero allí».
El artículo de El País recuerda que «los beneficios han caído, sobre todo, por la nueva ley europea que desde este año les obliga a pagar el IVA en el país desde el que opera el jugador en lugar de donde se ubica la compañía, como era hasta entonces. Más de 30 compañías afincadas en Gibraltar y otras localizaciones de baja carga impositiva han visto crecer sus gastos«. En este nuevo escenario el crecimiento como empresa adquiere una enorme importancia. Las pequeñas casas de apuestas no tiene cabida porque el margen de beneficio se reduce. De ahí que en los últimos meses Ladbrokes y Gala Coral hayan creado una de las mayores sociedades de apuestas de Reino Unido, valorada en 3.250 millones de euros, la irlandesa Paddy Power uniera su nombre al de la británica Betfair -facturan 1.500 millones- la misma cantidad que empleó GVC en adquirir Bwin.party, que tenía un acuerdo prácticamente cerrado con 888 Holdings.
Vía europasur.es