La empresa aún no ha solicitado la autorización para poder abrir ya su sala de juego.

 La apertura del primer Casino en la historia viguesa acumula retrasos y las fechas anunciadas por las empresas promotoras Cirsa y Luckia se han ido superando. La última prevista era para diciembre, para aprovechar la campaña de Navidades, pero tampoco ha sido posible. Ahora las compañías han decidido demorar la apertura hasta disponer del permiso de la Xunta, que cuenta con competencias autonómicas en regulación del juego, y la llegada de las máquinas que irán a la sala de juegos del centro comercial A Laxe. En cuanto a la autorización de la Administración gallega, desde el Gobierno autonómico se indicó que a día de hoy no habría llegado la petición de Cirsa y Luckia, y se subrayó que en todo caso se tramitará con celeridad una vez se presente. Al parecer, sí tendría ya visto bueno municipal, aunque este extremo no ha podido ser confirmado plenamente. Con respecto a las máquinas de juego, la empresa del Casino señaló que son de tecnología punta y provienen de Japón, lo que explicaría parte del retraso.

Hasta ahora, el local de ruleta más próximo a Vigo era O Grove, donde funciona el Casino La Toja, de la misma compañía que el vigués, que en teoría no sería sino una sucursal, aunque en la práctica funcionará de forma propia. También se sabe que ha finalizado el proceso de selección de personal y ya se ha colocado toda la información exterior, incluyendo luminosos en el acceso principal y en la fachada del centro comercial para darlo a conocer.
Como es conocido, el complejo de ocio ocupa una planta entera y estará gestionado por el Grupo Luckia en colaboración con Cirsa. Entre los diferentes perfiles laborales fueron elegidos croupiers, camareros y recepcionistas. En total, se calcula que el nuevo casino generará más de un centenar de nuevos empleos directos y al menos otros 75 indirectos. El casino contará con máquinas recreativas tipo C y diversas salas para juegos de mesa y ruleta.