Fifa

Federación Boliviana de Fútbol (FBF) envió a la  FIFA una solicitud para que investiguen denuncias de futbolistas sobre supuestos partidos arreglados y apuestas ilegales, según informó el pasado viernes una fuente de esa entidad.

Antonio Dicormis, director de la División Profesional de Bolivia, explicó en declaraciones a EFE, que se trata de «una petición» para que «se realice algún tipo de investigación» sobre las denuncias que hicieron algunos jugadores.

La sospecha se levantó en el mes de noviembre cuando el paraguayo del Guabirá de Montero Pedro Chávez acusó a sus colegas del Real Potosí de hacer negocios supuestamente relacionados con apuestas ilegales, después de un empate 2-2.

Decormis sostuvo además que se pidió la investigación pese a que las acusaciones de ese jugador y otros se hicieron «sin ninguna prueba fehaciente», ya que hasta el momento no existe denuncia formal, ni nombres de presuntos implicados.

Los jugadores que han declarado de esta manera se han retractado y han pedido las disculpas públicas a los clubes, en este caso ofendidos», expresó y agregó: «Se demostrará si es que ha habido amaño de partidos, caso contrario quedarán descartadas las declaraciones y quedaremos que el fútbol boliviano se maneje de buena fe».

Por otra parte, el periódico El Deber de Santa Cruz publicó en noviembre una nota en la que algunos dirigentes del fútbol admitían que las apuestas con efectos en partidos de la División Profesional boliviana son una realidad.

Añadió la versión que ese negocio «mueve millones de dólares en el país» y que para ello se recurre a la compra de dirigentes y futbolistas. El Deber, por su parte, mencionó que un partido del Real Potosí apareció en uno de los sitios de apuestas por internet más populares del mundo.