Sede de Enjoy

A través de la empresa Bizalia, ligada al exgerente de Hippocampus, la filial Enjoy Gestión tercerizó servicios de planes vacacionales. Pero el negocio no terminó bien: en la operadora de casinos aseguran que su proveedor emitió facturas falsas. Ambas se acusan mutuamente en la Justicia.

Impagos, facturas falsas, querellas cruzadas e incluso una solicitud de quiebra son parte la historia que hoy protagoniza la operadora de casinos y hoteles Enjoy, específicamente una de sus filiales, con un exproveedor.

A fines de 2017, Enjoy Gestión puso en marcha un contrato con Bizalia, empresa consultora cuyo dueño es el exgerente general del centro vacacional Hippocampus, Pablo Rivas Marín; para a través de esta compañía externalizar un servicio de planes vacacionales en los hoteles de la cadena.

Desde Enjoy explican que, a pocos meses de haber iniciado su labor, comenzaron una investigación a raíz de la cual salieron a la luz, a juicio de la operadora de casinos, diversas irregularidades de parte de Rivas y Bizalia en temas como manejo de recursos, pago de sueldos, cobros excesivos e inapropiados de gastos y otros.

A consecuencia de ello, dicen en Enjoy, pusieron término al contrato con Bizalia y asumieron directamente las obligaciones laborales de los trabajadores por su calidad de empresa mandante.

Este hecho inició una verdadera guerra judicial. En mayo de 2018, Rivas interpuso en el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago una querella criminal por delito de estafa en contra de altos ejecutivos de Enjoy como Gonzalo Ugarte, José Miguel Melo, Javier Ghigliotto, Eliseo Gracia Martínez y el exgerente general Gerardo Cood. Lo mismo hizo Enjoy, que en julio del año pasado se querelló criminalmente en contra de Pablo Rivas, su abogado Antonio Garafulic, y de José Luis Jeria Seymour, por falsificación de facturas por poco más de $1.500 millones.

Respecto a la primera causa, en Enjoy aseguran que esta fue desestimada por la Fiscalía, solicitándose su sobreseimiento. Esto es desmentido por la contraparte, que asegura que aún no se realiza la audiencia.

La empresa de Rivas asegura que el objeto en disputa son los dineros por los servicios prestados a Enjoy y que en ningún caso se trata de facturas falsas. Sin embargo, desde Enjoy plantean que se presentó una denuncia en el Servicio de Impuestos Internos en contra de Bizalia y los involucrados por este mismo tema.

Pero el caso llegó más allá. El abogado de Rivas, Antonio Garafulic inició en el 9°Juzgado Civil de Santiago un proceso preparatorio en representación de Seymour Marketing SpA, cuyo representante legal es José Luis Jeria Seymour, firma a la que Bizalia le cedió facturas por $1.500 millones. Desde Enjoy aseguran que la empresa de Jeria fue creada solo un par de meses antes de la emisión de esas facturas y con un capital de solo $1 millón.

Por otra parte, señalan que “la falsedad de las facturas presentadas por Rivas, Garafulic y Jeria Seymour ya fue acreditada en juicio por el perito Mario Carrasco Pacheco, por orden del 9°Juzgado Civil de Santiago, en el marco de la tramitación de la gestión preparatoria iniciada por Seymour Marketing SpA”.

Nicolás Vassallo, abogado que representa a Seymour Marketing, comenta que “la alegación de falsedad de las facturas fue rechazada, con costas, por el 9° Juzgado Civil de Santiago” y que inclusive también se rechazó la orden de no innovar solicitada por Enjoy Gestión “en atención a que no existe falsedad”.

Ayer, Seymour Marketing, empresa a la que se le cedieron las millonarias facturas, solicitó en el 15º Juzgado Civil de Santiago la liquidación forzosa de Enjoy Gestión, precisamente por el no pago de esas facturas. Desde Enjoy señalaron que “ejercerá todos los derechos y acciones para defenderse de esta injustificada acción, que no es más que una nueva etapa de la operación defraudatoria orquestada por Rivas” y que “estas acciones carecen de todo fundamento y serán desestimadas una a una, tal como ocurrió con la querella criminal que interpuso en contra de nuestros ejecutivos”.

Fuente: latercera.com