Casino Marbella
Poker Room del Casino Marbella

Los altos tribunales gallego y balear permiten desgravar el coste de inscripción, estancia, viaje o sustento se gane o se pierda dinero en el torneo.

Las ganancias obtenidas en el juego, sea presencialmente en un casino o de forma online, deben incluirse en la declaración de IRPF, donde las pérdidas podrán ser compensadas hasta el límite de los beneficios logrados el mismo año. Ahora, la justicia abre la puerta a que los jugadores puedan además deducirse del pago de sus tributos los gastos derivados de participar en el juego, ya sean el precio de inscripción en un torneo de póker, por ejemplo, o los costes de viajeestancia y manutención asociados a la partida.

Así lo reflejan dos recientes sentencias de los Tribunales Superiores de Justicia de Galicia y Baleares. La del primero hace referencia a un contribuyente que no presentó declaración de la renta de 2010 pese a que la Agencia Tributaria estima que aquel año ganó 32.800 euros al quedar segundo en el torneo Spanish Poker Tour en el Gran Casino Castellón (donde abonó 1.100 euros de inscripción o buy in); otros 6.500 euros por la décima posición del Spanish Poker Tour Lloret de Mar del Gran Casino Costa Brava; y 2.300 euros en dos torneos del Spanish Poker Tour Sevilla en el Gran Casino Aljarafe. El fisco le exigió 12.425,98 euros y 7.997,21 euros de sanción.

El contribuyente recurrió, negando haber jugado y aseverando que entonces era estudiante de ingeniería en la Universidad de Vigo y que en sus cuentas solo figuraban ingresos de sus padres. Alegó que se habrían usado falsamente sus datos para la inscripción en esos torneos, organizados por Everest Póker, web de la firma Cordovan Limited, domiciliada en Gibraltar. Si bien los tres casinos confirmaron su asistencia a los torneos y dichas ganancias, los jueces solo dan por bueno el dato del de Castellón porque la Agencia Tributaria no pidió testificar al resto, ni información a Gibraltar. La falta de rastro contable la obvian porque los premios eran en efectivo. Como consecuencia el tribunal estima parcialmente el recurso y obliga al fisco a recalcular la liquidación –y la sanción– tomando solo los 32.800 euros de Castellón pero restando los 1.100 euros de la inscripción.

El caso de Baleares atañe a un jugador de póker profesional que declaró unas ganancias patrimoniales de 35.000 euros en 2010. El fisco le reclamó 40.496,82 euros más 18.288,94 euros de multa, por infracción grave de ocultación, al constatar que en realidad había ingresado 190.000 euros. El jugador recurrió aduciendo que la inspección fue indiscriminada y que habría que descontar del monto los 57.870 euros abonados para inscribirse en los torneos y los 27.300 euros de sus gastos de desplazamiento, estancia y manutención.

Fuente: cincodias.elpais.com