El Juzgado de Instrucción Número 4 de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) imputa en la segunda fase de la operación Conífera a jugadores en activo y a particulares que vendieron sus datos personales por 100 euros.
La Policía Nacional ha lanzado este martes la segunda fase de la operación Conífera contra el amaño de partidos de fútbol para realizar apuestas ilegales. Está prevista la imputación de una veintena de personas que se sumarán a las 27 que ya estaban siendo investigadas por el Juzgado de Instrucción Número 4 de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) por pertenencia a organización criminal y corrupción entre particulares en el ámbito deportivo. La red habría manipulado los resultados de más de 30 encuentros de Primera, Segunda y Tercera RFEF y de la Liga Nacional de Gibraltar para obtener unas ganancias superiores a los 500.000 euros.
El grueso de los nuevos investigados vive en la provincia de Cádiz, aunque también se ha tomado declaración a residentes en Badajoz, Ceuta, Ciudad Real y Córdoba, según han confirmado a El Confidencial fuentes próximas a las pesquisas. Las averiguaciones de esta segunda fase se han centrado en jugadores en activo que habrían ejecutado los amaños sobre el césped, así como en varios particulares que vendieron sus datos personales a los cabecillas del grupo para que estos pudieran abrir cuentas sin antecedentes en diferentes operadores de apuestas. Los ahora acusados prestaban su nombre y DNI a cambio de 100 euros y un pequeño porcentaje sobre el dinero que la organización obtenía empleando sus identidades.
Uno de los jugadores investigados es un defensa de la Real Balompédica Linense (Cádiz), Javi Muñoz, que presuntamente habría intervenido en la manipulación del partido que jugó su equipo contra el FC Andorra en la última jornada de la temporada 21/22 de la Primera RFEF, el pasado mayo. El FC Andorra llegó a ese encuentro matemáticamente ascendido a la Liga SmartBank de Segunda División, pero el Linense necesitaba los tres puntos para evitar el descenso de categoría. Los gaditanos acabaron venciendo por 3-1 y sellaron su permanencia en Primera RFEF.
El primero de los goles del Linense se produjo tras un fallo flagrante del portero andorrano a los 14 minutos de juego. Los líderes de la organización apostaron por la victoria local en ese partido. Era imposible que se equivocaran. Los agentes del Centro Nacional Policial por la Integridad en las Apuestas y el Deporte (Cenpida) de la Policía Nacional han hallado conversaciones que sitúan al central del Linense como uno de los futbolistas que proporcionaban a la red información sobre los acuerdos clandestinos que se producían en los vestuarios. El episodio salpica al FC Andorra, aunque sea indirectamente.
También han sido imputados dos jugadores del CD Pozoblanco (Córdoba), otro del CD Rota (Cádiz) y un futbolista del CD Manchego (Ciudad Real) que la pasada temporada militó en el UD Montijo (Badajoz) de Segunda RFEF. A este último se le implica en las conversaciones para adulterar un UD Montijo-UD Tamaraceite que terminó con victoria para los visitantes por un abultadísimo 1-7 y que ya ha provocado otras imputaciones. Las diligencias se refieren a un largo número de marcadores igual de escandalosos.
El caso saltó tras una denuncia de LaLiga. En la operación de este martes participan efectivos de Europol e Interpol. Como adelantó este diario, en el sumario de la operación Conífera que se produjo el pasado junio también aparece una presunta prima a terceros de 15.000 euros relacionada con la última jornada de liga del Grupo X de la Tercera División RFEF de la pasada temporada. El CD Gerena (Sevilla) se comprometió presuntamente a pagarle esa cantidad al CD Utrera (Sevilla) si este conjunto conseguía imponerse al Córdoba B. El partido terminó en empate, pero las conversaciones quedaron registradas por los investigadores del Cenpida.
Fuente: elconfidencial.com