La Junta Directiva aprueba esta iniciativa, que apuesta por la formación de jugadores, técnicos y árbitros. Se creará un canal de denuncias, una Escuela de padres y se implantará un programa piloto en Segunda B contra la violencia en los campos
La Junta Directiva de la RFEF ha dado luz verde a un ambicioso Programa de Integridad Global que pretende actuar en todas las categorías, modalidades y estamentos del fútbol en nuestro país y que abarca desde medidas de prevención, formación o seguimiento de las competiciones y partidos, hasta la denuncia o sanción de las actuaciones contrarias a este propósito.
El objetivo principal es proteger los valores del fútbol y hacer que este deporte crezca de acuerdo a los mismos, eliminar la violencia de los campos así como cualquier tipo de discriminación, fomentar los hábitos de vida saludable de los futbolistas, así como la lucha contra el dopaje, y garantizar la limpieza de todas las competiciones futbolísticas, para evitar los amaños y las apuestas deportivas ilegales.
La RFEF es consciente de que el fútbol es un fenómeno social trasversal y, teniendo en cuenta que su esencia es el fair play, considera que es fundamental convertirse en referencia en la protección de la integridad en este deporte. Para ello, se desarrollarán acciones de Seguridad, entre las que se encuentran la lucha contra la violencia y la garantía de seguridad de espectadores y participantes en los eventos futbolísticos, con especial atención a los árbitros, entrenadores y, de modo particular, el fútbol femenino.
También habrá medidas de Integridad que permitirán proteger la limpieza de las competiciones, prevenir y luchar contra los amaños de los partidos y las apuestas ilegales, a través de la formación en primer término y llegado el caso mediante la denuncia, previa investigación. Asimismo, se contemplan acciones concretas para conseguir una competición en igualdad de condiciones desterrando el dopaje y fomentando los hábitos de vida saludable.
Para ello, se trabajará la concienciación, prevención y educación a través de cursos a todos los actores en este ámbito (jugadores, árbitros, clubes, técnicos) y se creará además una Escuela de Padres, “Padres a la banda”, para que sean los principales prescriptores de las nuevas prácticas deportivas.
Asimismo, se pondrá en marcha un canal de denuncias y comunicación confidencial. También está previsto iniciar un programa piloto en la Segunda División B del Campeonato Nacional de Liga, que posteriormente se ampliará al fútbol profesional, Tercera División y otras categorías, para erradicar la violencia en los campos, donde la formación será pilar básico.
Todas estas medidas se complementarán con un seguimiento y monitorización de las competiciones, así como de los mercados de apuestas. Además, se elaborará un mapa de concentración de incidentes violentos para su posterior tratamiento. El trabajo desarrollado en la RFEF estará coordinado con Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, instituciones, organizaciones y empresas de ámbito nacional e internacional. Las acciones previstas en este plan de la RFEF serán implementadas en cascada en las distintas federaciones territoriales, en aras a lograr el objetivo previsto.
La RFEF, de la mano de FIFA y UEFA, quiere convertirse en referente internacional en el ámbito de la integridad y el fair playdeportivo.