Marina Bay Sands, Macao

Uno de los territorios que más está notando la reapertura de las fronteras chinas y el aumento de las conexiones aéreas es Singapur. La ciudad-Estado, que abrió las suyas el año pasado, aspira a duplicar el número de turistas que viajen a la isla este 2023, en comparación con 2022, hasta llegar a los 12-14 millones de visitantes.

En este sentido, uno de los grandes beneficiados de estas reaperturas está siendo el sector del juego. Concretamente el de los casinos asiáticos. Es por eso por lo que Las Vegas Sands, controlada por la familia del difunto multimillonario Sheldon Adelson, está dispuesta a invertir 6.800 millones de dólares en Singapur y Macao.

Su intención no es ni más ni menos que la de aumentar su presencia en Asia en medio del auge que vive este sector en toda la región. Los ingresos récord -477 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2022- que han generado en Marina Bay Sands, un complejo de edificios donde se encuentra el casino más caro del mundo, propiedad de Las Vegas Sands, han abierto el apetito de este famoso operador.

«Nos complace observar que continúa la sólida recuperación en Marina Bay Sands durante el trimestre, con la propiedad brindando niveles récord de rendimiento tanto en juegos masivos como en ingresos minoristas», indicó en un comunicado Robert Goldstein, presidente y director ejecutivo de Las Vegas Sands.

Actualmente, Las Vegas Sands lleva siendo durante años el operador de casinos más grande del mundo. Liderado durante décadas por Sheldon Adelson, el negocio pasó a manos de su mujer y familia tras la muerte del famoso empresario. Según el índice de Bloomberg, Miriam Adelson posee un patrimonio de 34.800 millones de dólares, ocupando el puesto 35 de las grandes fortunas.

Fuente: eleconomista.es