Granada incorporará en 2018 un equipamiento turístico que los empresarios llevan décadas reclamando: un gran casino que enriquezca la oferta y se convierta en un reclamo capaz de atraer más de 50.000 visitas anuales y de mover alrededor de 38 millones de euros.

El proceso administrativo para la adjudicación del casino de juego se encuentra ya en su última fase, y en menos de dos meses la Consejería de Hacienda de la Junta de Andalucía podría resolver un concurso público que ha generado el interés de tres multinacionales de juego asociadas con empresas locales. Los tres ‘novios’ del Casino de Granada apuestan por construir esta infraestructura en Monachil, Armilla y Granada, con tres propuestas muy diferentes que cuentan con el informe favorable de los ayuntamientos de los municipios en los que se ubican sobre la conveniencia del establecimiento.

De momento, tras la recepción de los informes elaborados por los Ayuntamientos y la Diputación de Granada -incluidas las alegaciones presentadas por los vecinos que vivan a menos de cien metros del inmueble propuesto-, la Comisión de Juego y Apuestas de Andalucía está elaborado su dictamen, paso previo a que se dé vista del expediente a los representantes de cada una de las ofertas, abriendo un trámite de alegaciones.

Será entonces, según la información facilitada por fuentes de la Consejería de Hacienda, cuando se redacte la propuesta de resolución y se eleve a la Consejería para que resuelva la adjudicación de la oferta ganadora. La previsión es que la decisión final, la que determinará cuál de los tres ‘novios’ del Casino se lleva el gato al agua, se produzca en marzo. Según la orden de 11 de mayo de 2017 por la que se convocó el concurso público, el plazo máximo para resolver y notificar la resolución es de nueve meses desde la fecha de finalización de las ofertas. Teniendo en cuenta que este plazo culminó el 26 de agosto del año pasado, la fecha tope sería el mes de abril.

A la espera, contando los días, están los tres candidatos para construir el Casino de Granada: el Complejo el Capricho, aliado con la multinacional del juego europeo Novomatic; el Hotel Camino de Granada, acompañado de Cirsa; y el Grupo Orenes junto a la empresa Automáticos Canarios, que opta a construir el Casino en el edificio frente a la Feria de Muestras de Armilla ocupado en su momento por un gimnasio y varios locales comerciales pero que permanece vacío en la actualidad.

Las tres propuestas tienen sus pros y sus contras frente a las de sus competidores. La cercanía a la ciudad del Hotel Camino o el edificio de Armilla puede parecer una ventaja frente al Capricho, cuyos accesos son algo más complicados, pero las instalaciones promovidas por el empresario granadino Gregorio López, construidas hace 19 años precisamente con la idea de albergar un casino, reúnen unas condiciones inmejorables.

El empresario granadino, que asegura que ahora es tiempo de dejar trabajar a las administraciones, indica que su propuesta, que cuenta con el respaldo de una multinacional que ya participa en el Casino de Sevilla y en el de San Roque, está concebida para construir el establecimiento que «merece» Granada. Según el propietario del Complejo El Capricho, la provincia necesita una «atracción», un «casino de categoría» que constituya un complemento real a la oferta turística con espectáculos, restaurantes, y un hotel de 4 estrellas en las faldas de Sierra Nevada.

El casino tiene que ser «una instalación ejemplar de gran nivel«, y por ello se está preparando una sala con 1.800 plazas más «una sala de arte». La idea es construir «un espectáculo de casino» que esa una mezcla de «ocio, deporte, turismo y naturaleza«. La principal ventaja de El Capricho es la idoneidad de la infraestructura al proyecto y su capacidad para ponerlo en marcha casi de inmediato. Además, López indicó que otros puntos a favor son «su buena ubicación, la proximidad a la capital y la accesibilidad».

La propuesta de Orenes, situada en Armilla pero prácticamente en el límite con la ciudad, supondrá una inversión de 6,2 millones de euros, según el proyecto que se expuso en su momento a los vecinos. Con sus 12 mesas de juego, sus 74 puestos de máquinas de azar y la generación de 155 empleos directos y otros 194 adicionales entre indirectos e inducidos, la previsión de Orenes y Automáticos Canarios sería abrir las puertas del Casino, en caso de hacerse con la adjudicación, en apenas seis meses.

Según la información facilitada a este periódico por la compañía, la alianza empresarial «representa de por sí una garantía de éxito», por su «contrastada solvencia financiera, económica y técnica» y su experiencia como «dos de los grupo más importantes del sector del juego y ocio nacional«.

Entre las ventajas del proyecto, Orenes destaca su «excelente ubicación» en el término municipal de Armilla, junto al centro y la circunvalación. Además, valoran que su iniciativa se basa en la optimización de recursos ya existentes, «al dotar de un uso singular un edificio ya construido, pero actualmente sin actividad, y potenciar una de las zonas empresariales, comerciales y de ocio más importantes» del Área Metropolitana. El director comercial de la División de Casinos de Orenes Grupo, Enrique Carballido, asegura que para la alianza sería «un gran orgullo poder contar con un casino en una plaza tan importante como Granada«, poniendo en marcha un proyecto que consideran «viable» y que permitirá mejorar el posicionamiento de la ciudad y la provincia «como referente turístico y de ocio«.

El Hotel Camino y Cirsa tienen previsto desvelar esta misma semana su gran proyecto para el Casino, que se ubicaría en el mismo emplazamiento del hotel, situado en la Antigua Carretera de Málaga. El próximo jueves, la multinacional presentará por todo lo alto su propuesta en un acto al que está previsto que asistan autoridades locales y provinciales.

Según indica Cirsa, su proyecto es «sólido» desde el punto de vista técnico y «absolutamente ilusionante desde un punto de vista de futuro«. La compañía indica que para ellos «cualquier proyecto es relevante«, aunque reconoce que esta importancia es mayor al tratarse de un casino ubicado en España y Andalucía, una región «con gran peso específico en el conjunto de negocio» de la empresa.

«Con este proyecto, Cirsa seguiría apostando por la creación de empleo y el desarrollo económico de una región a la que le unen grandes lazos«, indican desde la compañía, que añaden que para Granada un casino sería «el complemento perfecto a la rica oferta con la que ya cuenta«.

Fuente: granadahoy.com