Más de 1.000 trabajadores representativos de 8.000 personas que trabajan en 183 centros de trabajo en Catalunya se han manifestado hoy en la Plaza de Sant Jaume de Barcelona para denunciar la marginación injustificada a la que les somete la Generalitat al mantener cerrada su actividad.

Para Victor Vero, portavoz del Col.lectiu Català de Treballadors de Joc “solo pedimos recibir el mismo trato que el comercio, los cines, los gimnasios y las peluquerías que son nuestros vecinos de actividad a pie de calle y están pudiendo trabajar”.

Vero afirma que “no hay justificación alguna para que una actividad que tiene control de acceso y esta hiper regulada permanezca cerrada dado que nosotros más que nadie podemos garantizar que se respetarán las normas de prevención del COVID marcadas por la Generalitat”.

Los trabajadores de los Salones recuerdan que en Catalunya han 183 salones de juego, bingos y casinos que permanecen cerrados en fase 1 y que no tienen garantía alguna de abrir en fase 2 pudiéndose dar la circunstancia de que cuando reabran los centros comerciales los únicos locales que permanezcan cerrados, sin motivo, alguno, sean los salones de juego.

Asimismo los trabajadores recuerdan que sus empresas pagana una alta fiscalidad que aporta a las arcas de la Generalitat 240 millones de € anuales, dinero que es fundamental para poder hacer frente a las emergencia de la crisis.

Además de los 8000 puestos de trabajo de los que más del 50% podrían salir automáticamente del Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en el caso de la Generalitat accediera a darles el mismo trato que a otros sectores, hay 29.000 empleos indirectos relacionados con los salidos, bingos y casinos en ámbitos como la distribución de bebidas, seguridad, limpieza, inmobiliario, etc…