En un momento en que la industria de los deportes de fantasía está bajo el escrutinio de cada vez más estados, las autoridades de Nevada se valieron de las propias palabras e imágenes en línea de DraftKings para evidenciar que dichos portales encajan en el criterio de apuestas.
Un día después de que los reguladores de Nevada prohibieron la operación de dichos sitios en el estado a menos que obtengan una licencia de apuestas, el departamento local de justicia emitió el viernes un memorándum en el que se citó una entrevista publicada hace tres años en Reddit.com, en la que aseguran que el director general de DraftKings, Jason Robins, comparó su empresa con un casino y describió el concepto como una mezcla de póquer y deportes de fantasía.
El memo también hace énfasis en el texto que acompaña las imágenes, en que el sitio web de DraftKings usa la palabra “apuestas” como descripción.
DraftKings y otros en la industria de los deportes de fantasía, incluyendo su principal competencia, FanDuel, insisten en que sus sitios no se centran en las apuestas. Añaden que estos destinos en línea resultan legales bajo la ley federal de 2006 que exentó a los deportes de fantasía de la prohibición de apuestas en línea.
“Parece que aunque los representantes de dichas empresas aseguran públicamente que no creen que los deportes de fantasía involucren ‘apuestas’, utilizan el término ‘apostar’ cuando no están hablando con las autoridades”, subrayó el memorándum.
Una transcripción de la entrevista que sigue publicada en línea no identifica a Robins por nombre, pero en la introducción se indica que los tres hombres que fundaron DraftKings son quienes responden las preguntas.
DraftKings no respondió de inmediato a solicitudes de comentario.
En menos de dos semanas, las dos empresas principales de una creciente industria han pasado de lucir imparables e intocables a enfrentar el escrutinio de investigadores, legisladores, reguladores e incluso de sus participantes sobre la legalidad y sus prácticas laborales, luego de que se reveló que los empleados a menudo participaban en sitios de la competencia, generando dudas sobre el posible uso de información privilegiada para ganar.
Las determinaciones tomadas por Nevada son seguidas de cerca por otros estados y legisladores que contemplan si dichos sitios en línea constituyen o no apuestas, basándose en sus propias leyes.
Los participantes en los sitios web no regulados pueden competir en juegos en los que se involucran deportes profesionales o colegiales, pagando una cuota de entrada que va a un premio común. Los clientes intentan conformar equipos que obtengan la mayor cantidad de puntos basándose en estadísticas de la vida real en cierto periodo, y se determina cuántos de los primeros lugares son merecedores al premio.
Las inscripciones para DraftKings varían entre los 25 centavos y los 5.000 dólares. Y algunos premios superan el millón de dólares.