El demandante, austriaco, despilfarró su fortuna entre 2002 y 2012 en estas máquinas tragamonedas y argumentó que se encontraba en un estado de adicción total.

El hombre dijo que su discernimiento se encontraba alterado en aquella época por su adicción, lo que hizo fueran declaradas nulas sus apuestas, según el tribunal de Wiener Neustadt, que instruyó el caso.

El operador de las máquinas incriminadas, Novomatic, uno de los líderes mundiales de las “tragaperras”, cuya sede se encuentra cerca de Viena, apeló la sentencia.

Ante la proliferación de casos de juego compulsivo (ludopatía), la municipalidad de Viena prohibió este tipo de máquinas salvo en los casinos, el 1 de enero de 2015.

La capital austriaca contaba con unas 2.600 máquinas de este tipo antes de que entrara en vigor esta medida.

Fuente: pulzo.com