En España no hay ninguna estadística oficial que mida el grado de absentismo de los trabajadores. Si bien, hay distintas formas de aproximarse a esta situación, una de ellas es la fórmula que utiliza Adecco Group Institute, que refleja que la tasa de absentismo en el mercado laboral español en el cuarto trimestre de 2021 fue del 6,6%, la misma que en el trimestre anterior y apenas tres décimas menos que en el mismo trimestre del año anterior.
¿Cómo mide el servicio de estudios de esta multinacional la tasa de absentismo? Para empezar, extrae las horas mensuales que trabaja cada empleado de media de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) que afectan a un agregado de la industria, la construcción y los servicios. La información desagregada del tiempo de trabajo permite calcular posteriormente las horas pactadas efectivas mensuales (en convenios colectivos) a las que se suman las horas extra. A este total de horas realizadas se le restan las que no se han trabajado por motivos de vacaciones y días festivos y por estar en un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). El resultado son las horas pactadas efectivas.
Pero, además, de estos dos motivos para no realizar las horas de trabajo hay otros muchos que son los que conforman el absentismo, según esta metodología. El principal motivo de absentismo, por número de horas no trabajadas, es la incapacidad temporal (bajas médicas por contingencias profesionales o comunes) pero hay otros motivos ocasionales como las horas no trabajadas por maternidad y adopción, permisos remunerados o huelgas. Y, por supuesto, en esta definición de absentismo se incluirían también las faltas injustificadas que no son, sin embargo, las principales en la formulación de la tasa general. Por ello, desde Adecco alertan del «error que supone equiparar el absentismo con las bajas injustificadas».
Según todo esto, a la tasa del 6,6% de absentismo antes citada se llegaría dividiendo las horas perdidas por absentismo (incapacidad temporal, permisos remunerados, huelgas y faltas injustificadas) entre el total de horas pactadas. Haciendo esta división por sectores o comunidades se obtiene una fotografía aproximada del absentismo en España, según el exhaustivo informe publicado ayer por esta multinacional. Prueba de que las bajas médicas son la principal causa de ausencia al trabajo es que solo este motivo representa una tasa de absentismo del 4,9%. Pese a la fuerte caída de la incidencia del Covid-19 en las plantillas la tasa de ausencia por incapacidad temporal es idéntica a la del trimestre anterior y sólo cuatro décimas más baja que la de un año antes.
Sectorialmente, este trabajo muestra que en las agencias de viajes y operadores turísticos –que coinciden con la actividad que menos se ha recuperado de la pandemia– se encuentra la mayor tasa de absentismo general, que se eleva al 17,3%, más de diez puntos superior a la media nacional. En este caso, solo el absentismo por incapacidad temporal sería de casi el 14% y el resto hasta el 17,3% por el resto de causas ocasionales antes citadas. El segundo sector con mayor tasa de absentismo son las casas de apuestas, con un 12,1% de tasa general y un 7,9% de tasa de bajas por incapacidad temporal.
Pero llaman especialmente la atención los datos de los servicios de alojamientos (hoteles) donde el peso de las bajas médicas no es tan grande (con una tasa de absentismo por este motivo del 5,2%, mientras que su tasa general es casi el doble (9,6%), lo que quiere decir que las ausencias en este sector están más generadas por otros motivos que no son médicos. El ejemplo contrario son los trabajadores del área sanitaria, con la tercera tasa más alta de absentismo general (9,8%) solo es dos puntos superior a la tasa de ausencias por motivos médicos, por lo que la inmensa mayoría de las faltas al trabajo de este colectivo de trabajadores obedece a bajas por incapacidad temporal.
Completan la lista de las actividades más absentistas el transporte aéreo (9,8%); la industria del tabaco (8,8%); fabricación de vehículos (8,8%); asistencia en establecimientos no residenciales (8,7%); servicios a edificios y actividades de jardinería (8,7%); y recogida, tratamiento y eliminación de residuos (8,6%), entre otros.
En el lado opuesto, las ramas de actividad que presentan las tasas de absentismo más bajas son las relacionadas con el cine y el vídeo (2,5%), las telecomunicaciones (3,1%), los servicios de información (3,3%); y las actividades veterinarias (3,4%).
La radiografía territorial apunta a Asturias y Navarra como las comunidades con mayores tasas de absentismo, con el 7,8% y 7,6% respectivamente. Mientras que Extremadura (con un 6,2%) y Andalucía (6,2%) cuentan con las tasas más reducidas del país.
Fuente: msn.com