Alexandre Padilha

La Secretaría de Relaciones Institucionales del gobierno federal de Brasil, liderada por el ministro Alexandre Padilha, habría iniciado ya el diálogo con respecto a la regulación de las apuestas deportivas con algunos miembros del Congreso, esto de acuerdo con la cadena de noticias CNN.


A pesar de haber sido legalizada desde el 2018, la legalización de apuestas todavía se encuentra a la espera del reglamento, mientras continúa, Fabio Graner, analista de Jota Economics en Brasilia, analizó la situación y dio a conocer como se puede beneficiar el gobierno con el tema de las apuestas deportivas.

De acuerdo con Graner, la regulación podría permitir que el gobierno brasileño recaude aproximadamente $1.2 billones de dólares al año, una vez que este sea firmado por el presidente brasileño, Lula Da Silva.

El equipo económico del gobierno evalúa el tema de una medida provisional para regular la práctica de las apuestas deportivas, que crece aceleradamente en el país. Varias casas de apuestas se han asociado con clubes de fútbol, además de campeonatos relevantes, como la Copa do Brasil.

Según JOTA, la idea es que aquellas casas de apuestas que no se registren y no se instalen formalmente en Brasil ya no podrán hacer publicidad, lo que representa un enorme mercado para el sector.

El incentivo

El último escándalo que envuelve a las industrias del deporte en Brasil fue el incentivo para que Lula Da Silva acelerara el proceso de la regulación de apuestas.

Se trata de una investigación por un posible fraude en la Serie B, llevada a cabo actualmente por el Ministerio Público de Goiás por varios partidos de fútbol que habrían sido corrompidos por una organización, acusada de “amañar el resultado y obtener un beneficio superior a los 600 mil reales”.

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